miércoles, 1 de abril de 2020

Viajeros de papel. Noche en el museo.

Buenas Noches, lectores.
Hoy os escribo tarde ya que no podía esperar a explicaros mi gran y nueva aventura. 

Todo empezó mientras estudiaba para el examen de Lengua castellana y Literatura, el tema era el romanticismo y la profesora nos mandó como tarea que eligiéramos un cuadro de la galería Uffizi de Florencia y buscáramos datos e información sobre este. Yo elegí la cabeza de Medusa.

En vez de buscar la información en Internet decidí ir a uno de mis lugares favoritos, la biblioteca, y allí buscar lo que necesitaba y estudiar sin distracciones a mi alrededor. Cuando llegué le pregunté al bibliotecario dónde podía encontrar libros sobre el romanticismo y él, amablemente me guió hacia esa sección. Empecé con mi búsqueda y ,finalmente, encontré un libro que trataba sobre los cuadros de la galería de los Uffizi. 

Hojeé las páginas hasta localizar el apartado del cuadro de la cabeza de Medusa, ahí explicaba que este fue creado por Caravaggio en 1597 y que el rostro de Medusa se pintó sobre un lienzo y luego se enganchó en una especie de escudo de madera. Se me hizo tarde y volví a casa, en el camino una mujer vendía flores y le compré un gran ramo para decorar mi comedor. Mientras me quitaba los zapatos en la entrada de mi piso, me vino una alocada idea a la cabeza: ¿Y si en vez de viajar en el tiempo, viajaba al interior de un cuadro?
 Inmediatamente, saqué el libro de la mochila, y con el ramo de flores aún en la mano, lo abrí por el apartado del cuadro al que quería llegar, y de repente aparecí en un lugar totalmente diferente. 
Me hallaba dentro del cuadro de la cabeza de Medusa y aún tenía el ramo en mis manos. Al ver las serpientes me dieron escalofríos y pensé que le quedarían mejor las flores que acababa de comprar que no esos animales. No se como, pero en un abrir y cerrar de ojos Medusa ya no daba miedo y ¡tenía flores en la cabeza! 

Me asusté y abrí el libro para volver a casa. Al llegar encendí la televisión, para despejarme, y en ese momento comunicaban que el cuadro, en el que estaba minutos atrás, había cambiado por arte de magia, ya que comprobaron que nadie lo hubiera robado. Y supongo que desde vuestros hogares ya conocéis la notícia, pero quedaros tranquilos mañana intentaré solucionar el problema.
Medusa by Caravaggio.jpg



Viajeros de papel. Infierno.

Un mes después de mi último viaje en el tiempo decidí que ya era hora de emprender uno nuevo, aunque diferente, más ficticio. Fuí a la estantería del comedor y cogí el libro más antiguo de todos:
 la Divina Comedia de Dante. Lo abrí por el principio y de la nada aparecí en una barca junto a dos hombres en un lugar oscuro y siniestro. A mi lado se encontraba Dante y delante Caronte, yo me había convertido en un señor, supuse que me hallaba en el cuerpo del poeta Virgilio, guía de Dante. Caronte nos dejó en la orilla, y desde allí recorrimos todos los círculos del Infierno. 
Llegamos al primer círculo donde habitaban los que murieron sin haber recibido el bautismo, su condena era saber que permanecerían ahí siempre. Pasamos al segundo círculo y nos topamos con Minos, a quien las almas confesaban sus pecados, ahí se encontraban los lujuriosos que eran arrastrados por un incesante y fuerte viento. En el tercer círculo, guardado por Cerbero (el perro de las tres cabezas), se castiga el pecado de la gula, donde se sufre una tormenta perpetua con lluvia y granizo. Seguidamente atravesamos el cuarto, allí permanecen los pródigos y los avaros, el quinto, donde se hallan los castigados por la ira, el sexto, en el que se condena a los herejes, y el séptimo, que permanece custodiado por el minotauro y se castiga a los violentos, hasta llegar al octavo. 
Entramos al octavo círculo, en el que se condenan las distintas clases de fraude, y vimos una gran catarata. Ya en el noveno círculo, donde se encuentra Lucifer (un gigante de unos mil metros), mi aventura llegó a su fin. Saqué mi novela y la abrí nuevamente.


Al aparecer en casa me sentía agotada y me acosté en la cama para descansar y asimilar todo lo sucedido durante el trayecto.

Viajeros de papel. Tiempo de valientes.

Dos semanas después de mi última aventura decidí emprender un nuevo viaje en el tiempo. Rebusqué en la estantería del salón y, esta vez, cogí un libro titulado “Mujeres en el deporte”, lo abrí por una página al azar y todo se oscureció.

De repente me encontraba en las gradas de una especie de estadio, que me pareció antiguo por sus instalaciones.Le pregunté al señor de mi lado y me explicó que me encontraba en Estados Unidos, en los años 50, disfrutando un partido de el equipo de béisbol “Kansas City Monarchs”. No entendía por qué motivo el libro me había situado ahí, así que salí para investigar un poco el lugar. Ya fuera del estadio choqué con una señora y caí al suelo:

  • ¡Ay! Perdona, me he despistado y no la he visto - se excusó la señora amablemente - ¿necesita ayuda?
  • No, tranquila estoy bien- le contesté, su cara me resultaba familiar- perdona, ¿nos conocemos? 
  • Ahora mismo no caigo en quién es usted, yo soy Marcenia Lyle Alberga, encantada.
  • Lo mismo digo, yo soy Cellie - dije casi susurrando, ¡ella era Toni Stone! - usted es Toni Stone? pregunté sin preámbulos.
  • ¡Sí! ¿De qué me conoce?
  • A usted la conozco gracias al deporte que practica, se le da genial y le considero una persona muy valiente, ha podido dedicarse
 a lo que le gustaba y ¡ha superado todas las dificultades! - le dije ilusionada.
  • Me alabas - contestó felizmente- aunque no me ha resultado un camino sencillo, he luchado por mis derechos, como mujer, contra el racismo e, incluso, he fingido tener 22 años en vez de 32 para entrar en mi segundo equipo de béisbol.
  • ¡Wow! - exclamé sorprendida- ya verás como algún día serás reconocida en todo el mundo -  afirmé, sabiendo que poseía un lugar en el Salón de la Fama de Cooperstown. 
  • No puedo sentirme más afortunada escuchando tus palabras, pero ahora me debo ir, hasta la próxima - se despidió.
  • Adiós.
Después de aquel encuentro volví a coger el libro y regresé a casa. Otra aventura ya cumplida, y intuía que no sería la última.



martes, 31 de marzo de 2020

Viajeros de papel. Santiago de Compostela


Un mes después de mi viaje en el tiempo decidí que ya era hora de averiguar si podía regresar al pasado y emprender una nueva aventura. Escogí el segundo libro de la trilogía de “Los caminos de Santiago”, lo abrí por una página al azar, y de repente todo se distorsionó y aparecí en medio de una calle ancha de un pueblo que me pareció muy acogedor. Empecé a caminar y poco después me di cuenta de que no llevaba mi libro y de que vestía con un atuendo de la época. Gracias a ese ropaje supuse que me hallaba entre el siglo X y el XV, acto seguido me encontré a unos campesinos que me indicaron que me encontraba en Sarria, Lugo, en el siglo XII. Según mis cálculos me encontraba a unos 100 km de Santiago de Compostela, mi destino. 
El sol ya caía por lo que fui en busca de un alojamiento, aproximadamente una hora más tarde me acogieron en un monasterio, en el que pasé la noche. Al día siguiente cabalgué  en un caballo que conseguí en un establecimiento al lado del monasterio, hasta llegar al anochecer a Palas de Rei. Y ahí me alojé en unas cabañas de los alrededores, sin embargo no pude comer nada más que un miserable trozo de pan. Por la mañana salí pronto para llegar lo antes posible a Santiago de Compostela y buscar mi libro para regresar a casa.

Finalmente alcancé mi destino por la tarde e inmediatamente entré en la Catedral de Santiago, la registré hasta que me tope con la obra que me llevaría de vuelta a casa, seguidamente lo abrí. Regresé a mi hogar después de pasar dos noches fuera, aunque en el presente seguía siendo el mismo dia que me fuí. Sentía un hambre voraz así que cené y descansé para mi próxima hazaña. 






Viajeros de papel. La máquina del tiempo

Todo empezó dos días atrás, cuando me encontraba en el parque leyendo el libro de mi niñez: Prohibido leer a Lewis Carroll. Casualmente esa mañana revisando mis libros, que tenía previsto donar, lo divisé entre aquellos montones y como mi agenda se encontraba vacía decidí ir a leerlo para así descubrir todos los misterios que albergaba. Antes de comenzar con mi esperada lectura observé la portada con detenimiento, qué recuerdos pensé, abrí la novela y me fijé en que aún conservaba escrito mi nombre: Cellie.

Pasé de página, en blanco, otra, en blanco, ojeé en cada rincón del libro, ¿habían desaparecido las letras?, no, imposible. No daba crédito a lo que contemplaba, era desconcertante, ¿sufría alucinaciones? De repente percibí una extraña presencia a mi alrededor, conseguí distinguir un conejo blanco al final del parque y sin pensármelo dos veces salí corriendo detrás del animalillo. En medio del correteo tropecé y caí en una charca, sin darme cuenta ahora me encontraba en un extraño túnel ¿cómo llegué hasta allí?
Seguí caminando hasta toparme con una estantería repleta de libros.

Empecé a cotillear lo que poseía se mueble y descubrí uno que me resultaba familiar, se trataba de: Prohibido leer a Lewis Carroll. Sin más dilación lo cogí y en un abrir y cerrar de ojos todo se desvaneció y yo aparecí en el parque, donde empezó esta locura, pero lo notaba cambiado. Pensé que lo ocurrido fueron imaginaciones mías y me dirigí a casa, hasta que vi algo que me impactó, acababa de verme, pero no a mi yo de ahora sino a mi yo del pasado.

A partir de ese encuentro investigué, y descubrí que me hallaba en el año 2013, por entonces yo tenía diez años y vivía obsesionada con la novela que me causaba tanto misterio ahora mismo. Necesitaba descubrir la forma de volver al presente, no quería permanecer en el pasado más tiempo. Pensé en cómo llegué hasta donde me encontraba ¿y si se volvía de la misma forma que se llegaba? Debía intentarlo, así que inmediatamente fui a buscar a la única persona que creía que podía poseer mi librito: mi yo del pasado.

Cuando llegué a “nuestra casa” entré por la puerta trasera, mi yo de diez años se situaba en el salón y supuse que lo que andaba buscando permanecía en la mesita de mi habitación, pasé cuidadosamente a través de cada puerta para que nadie me viera hasta entrar, ya ahí dentro busqué silenciosamente, cuando lo divisé seguidamente lo agarré y lo abrí.

Otra vez me encontraba en el parque, comprobé si me hallaba en el presente y efectivamente estaba en lo cierto. En ese momento terminó mi aventura, pero me preguntaba si acababa de descubrir una manera de viajar en el tiempo...

8.5. añade algunos signos de puntuación y quedará perfecto.


miércoles, 20 de marzo de 2019

Caza del tesoro. Machado

1. Antonio Machado, nació el 26 de Julio de 1875 en Sevilla.
1.1. Su abuelo era antropólogo, zoologo, medico, escritor, ictiólogo y científico, y su padre era escritor y antropólogo.
2. Los fundadores fueron un grupo de profesores amigos del abuelo de Machado.
2.1. Empezó el instituto a las 14 años pero suspendió Latín y Castellano.
2.2. Antonio Machado finalizó el bachillerato en el Instituto Cardenal Cisneros, para más tarde matricularse en Filosofía y Letras, en la Universidad de Madrid.
3. Entre el 1893 y el 1896 mueren el padre y el abuelo de Machado, estas muertes conllevan a Machado y a su família a tener que vivir con el  dinero de su abuela, a causa de su penosa situación económica.
4.1. En 1986 acude a la tertulia de don Eduardo Benot, lingüista y ex ministro durante la primera república. 
4.2. Helios, Blanco y Negro, Alma Española, Renacimiento Latino y la República de las letras.
4.3. Antonio Machado en su viaje a París conoció a Enrique Gómez Carrillo, a Pío Baroja, Paul Verlaine, OScar Wilde y a Jean Moreas. 
5. En 1907 Machado  obtiene una de las cátedras de francés y elige Soria, en 1909 es nombrado vicedirector del Instituto de Soria y en 1912 aparece Campos de Castilla.
6.  Antonio es muy sensible al lugar y todo lo que va recordando le deja huella. También siente nostalgia, porque allí conoció a la mujer que poco después de casarse murió. 
7. La primera postura es de aceptación y de corroboración, en cambio, la segunda postura era de negación.
8. En el 1935 se adhiere a la Asociación Internacional de Escritores para la defensa de la cultura, al estallar la guerra civil tras el golpe de estado del 18 de Julio de 1936, Machado se adhiere al bando republicano.
9.Antonio Machado llegó a Colliure con su hermano José y su madre, allí pidieron ayuda y se acabaron instalándose, pocas semanas después Machado entró en coma, y poco después murió.
10.


















11. A Antonio Machado le tocó vivir uno de los momentos más difíciles para España, en los que había una constante inestabilidad política y social así como una lucha para ocupar el poder del estado. A lo largo de su vida tuvo que vivir momentos como la semana trágica, huelgas como la de 1917, la Primera Guerra Mundial, la Proclamación de la Segunda República Española, y por último la Guerra Civil Española.




























miércoles, 6 de febrero de 2019

Caza del tesoro. Bécquer


Resultado de imagen de adolfo becquer

Cuestionario:

1. Gustavo Adolfo Bécquer, nació en Sevilla, el 17 de Febrero de 1836. Su noble família provenía de origen flamenco.

2. Gustavo Adolfo Becquér no tuvo  una infancia feliz, ya que se quedó huérfano a los 10 años y vivió su infancia en Sevilla.

3. Adolfo Gustavo Becquér tuvo que dedicarse al periodismo y hacer adaptaciones de obras de teatro extranjeras para poder superar las estrecheces y apuros económicos.

4. Becquér conoció a Josefina Espín, pero poco después descubrió a su hermana, la que acabaría siendo su musa. Julia Espín fue la musa de Adolfo Bécquer, sin embargo al cabo de un tiempo decidió mirar hacía otro lado y acabo cantando en lugares muy prestigiosos en aquella época.

5. Adolfo Gustavo Becquér contrajo matrimonio con Casta Esteban, con la que tuvo tres hijos.

6. Para sacar adelante a su familía Becquér compuso leyendas, escribió crónicas periodísticas y cartas literarias.

7. Una de las principales razones por las que su mujer lo abandono fue porque, por causa de la revolución de 1868, él perdió su trabajo y ella lo dejo.

8. Adolfo Becquér murió por una tuberculosis y problemas en el hígado, sobrevino a la muerte con 34 años.